Se celebra el Día Mundial del Matrimonio

SALT LAKE CITY — Cada tercer domingo de febrero se celebra el Día Mundial del Matrimonio con una Misa patrocinada por el Encuentro Matrimonial Mundial, un movimiento que pretende honrar a los esposos como responsables de la familia, la unidad básica de la sociedad.

Durante la Misa, parejas pertenecientes a este movimiento presentaron objetos que simbolizaron el papel y el valor del matrimonio en la Iglesia.

"La canasta con cosas para bebé nos recuerda que los esposos somos dadores de vida y pro-vida", dijo Carmen Hernández quien, junto a su esposo Martín, pertenece al Encuentro Matrimonial Mundial desde hace 15 años. "Las espinas de la rosa representan los momentos difíciles dentro del matrimonio. Los pétalos simbolizan la suavidad y fragilidad", dijo Martín.

También se presentaron un par de velas que simbolizaron al matrimonio como una fuente de ayuda para iluminar al mundo y una Biblia y un crucifijo para representar la presencia de Dios en los hogares.

El perdón es fundamental en los matrimonios y en cualquier otro tipo de relación, por eso, debemos deshacernos de los pensamientos negativos para obtener una buena comunicación con Dios, los demás y nosotros mismos y para tener la habilidad de perdonar y pedir perdón, dijo el padre Omar Ontiveros, Vicario parroquial de la Catedral de la Magdalena en Salt Lake City durante su homilía.

"El hombre leproso (del Evangelio) estaba condenado a ser excluido… Imagínense cuántos pensamientos tóxicos no habrá tenido. Cuánta carga emocional y espiritual no habrá sufrido". Pero el leproso decidió dejar atrás aquellos pensamientos y miedos que no le permitían continuar "porque confió en Jesús, un hombre que podía ayudarle con sus problemas. Puso su mirada fija en Jesús", dijo el P. Ontiveros.

El leproso se acercó a Jesús "y él le tuvo una gran compasión, le extendió la mano y lo tocó". Al instante, Jesús absolvió al leproso de su enfermedad y de su condena. También le devolvió la dignidad como persona.

"Tal vez tú no puedas sanar la lepra, pero sí puedes devolverle la dignidad a alguien", dijo el P. Ontiveros. Puedes devolverle la dignidad a tus hijos que maltrataste pidiéndoles perdón; a tus padres, de quienes te burlaste y avergonzaste, dándoles un abrazo y un beso; a las personas que has matado con la mirada o con tu tono de voz, haciéndoles el bien, dijo.

"Dios es compasivo, bueno y misericordioso"... Si tienes una carga difícil o quieres cambiar un comportamiento, haz como el leproso, acércate a Jesús y dile ‘Señor, si quieres tú puedes curarme, tú puedes cambiarme’".