Dos padres Rogacionistas de las Filipinas llegan a Utah a ejercer ministerio/Padre Carlos Guzmán, RCJ

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Padre Carlos Guzmán, RCJ

Los padres  Rogacionistas del Corazón de Jesús es una orden  de sacerdotes y religiosos que fue fundada el 16 de mayo de 1897 por San Aníbal Maria di Francia. La palabra ‘Rogacionista’ viene del latín ‘rogate’ el cual significa oración.

Desde su fundación la orden se ha propagado de Italia a los Estados Unidos, Europa, Sur América, México, India y las Filipinas, entre otros países.

SALT LAKE CITY — El padre Carlos Guzmán, RCJ, quien recientemente junto con el padre Ryan Jiménez RCJ llegaron a servir en la Diócesis de Salt Lake City, muy pronto celebrará el 20 avo aniversario de ordenación sacerdotal.

Sin embargo, “de joven no tenía el deseo de ser sacerdote,” dijo el padre, pero el participar con el coro de su parroquia le hizo darse cuenta de su llamado. “Y así más adelante, con el deseo de servir a las personas, pensé que ingresar al seminario sería la mejor manera para hacerlo,” dijo el padre.

En 1990 ingresó al seminario a los 16 años de edad, inmediatamente después de la preparatoria.

“Eventualmente conforme seguí con mi formación, descubrí que me gustaba mucho este tipo de vida, así que seguí para ser sacerdote,” dijo el padre.

El 16 de mayo del 2004 fue ordenado al sacerdocio.

Antes de llegar a Utah, el padre Guzmán fue el rector del Colegio Rogacionista, una institución Católica privada de educación superior en las Filipinas que ofrece preparatoria, universidad y cursos técnicos.

 El padre dijo que la vida sacerdotal puede ser muy demandante, llena de alegrías y de retos.

“Siempre hay retos, pero también mucha tranquilidad... soy muy feliz con lo que hago sirviendo a los jóvenes y con mi ministerio pastoral en las parroquias,”’ dijo el padre Guzmán.

Estando en la Diócesis de Salt Lake City el padre espera que él y el padre Jiménez puedan apoyar invitando a los jóvenes al seminario o a servir en una orden religiosa.

“Pero también a descubrir como acercarse más a Dios, y eventualmente ser instrumentos en la ayuda al discernimiento de sus dones al sacerdocio o a una vida religiosa,” dijo el padre Guzmán.

También el padre dijo que es muy importante apoyar a que los jóvenes “descubra la belleza de conocer a Dios.” Los jóvenes pueden llegar a conocer mejor a Dios no necesariamente ingresando a la vida religiosa, pero. “sabiendo que Dios los ama. Que siempre los acompaña,” dijo el padre Guzmán agregando que él quiere ayudarlos a  “embelesar su fe y acercarse mas a Dios,” esta es una de las misiones que tenemos aquí.

Esta es la primera vez que está en los Estados Unidos y “me siento muy feliz y optimista sobre mi presencia aquí para el apostolado,” dijo el padre.

También compartió que se siente muy motivado, “por el apoyo, especialmente del Obispo Solis y de los sacerdotes de las Filipinas y de Utah,” dijo el padre. “Veo y siento la cálida bienvenida de las personas, y por eso estoy agradecido.”

Algo que le ha sorprendido en Utah es haber encontrado  “el ministerio y la cele-bración simples,” dijo el padre.

La celebración de la Liturgia puede ser mejor y ser embelesada para que el pueblo de Dios tenga un mayor sentido de participación.

El padre espera que las personas vaya a Misa “no solo para cumplir una obligación o deber, sino para profundizar su fe y devoción en la celebración de los Sacramentos,” dijo el padre.

 El padre está muy agradecido por poder servir en esta nueva comunidad en Utah. “Gracias por darnos la bienvenida, haremos todo lo posible para apoyar a los jóvenes y a la Iglesia en Utah... Lo que sea que les podamos ofrecer, siempre será una forma de demostrar nuestro deseo y  servicio a la Iglesia aquí en Utah.”

Durante los primeros meses conforme pasan por la orientación en la Diócesis, el padre Guzmán y el padre Jiménez servirán como vicarios parroquiales temporales en la Catedral de la Magdalena.