El Obispo Solis visita en Centro Newman USU

IC foto/Marie Mischel

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El Obispo Oscar A. Solis platica con los estudiantes que forman parte del Centro Newman de St. Jerome en Logan.

Traducido por: Laura Vallejo

LOGAN — El Obispo Oscar A. Solis celebró Misa el primer domingo de Adviento con la comunidad del Centro Newman de St. Jerome en Logan.

Antes de la Misa, el obispo se reunió con los estudiantes que participan en el centro.

“Ustedes no solo son el futuro de la Iglesia Católica, sino son líderes,” dijo el Obispo Solis a una docena de estudiantes que se reunieron por la tarde antes de la Misa.

El Obispo agregó que la Iglesia reconoce los dones de los jóvenes; que ellos tienen mucho que contribuir a la misión de la Iglesia.

“Todo lo que hacen aquí en el Centro Newman necesita estar basado en la oración,” para ayudar a construir la Iglesia, dijo el Obispo.

El Obispo Solis les pidió dieran sus sugerencias para atraer a más jóvenes a la Iglesia, y les pregunto cómo mantener a las personas involucradas. También escuchó sus preocupaciones, Por ejemplo. Ellos le preguntaron cómo llevar la fe a las situaciones cotidianas cuando otras personas se sientes incómodas.

El Obispo Solis les dijo que siendo genuinos al compartir sus creencias mientras se reconocen las diferencias es muy importante. Agregando que es por las diferencias “que creamos más divisiones y polarizaciones en nuestra comunidad y en nuestra sociedad”, en lugar de trascender las barreras.

Varios estudiantes dijeron que el Centro Newman ha sido una bendición y que las actividades realizadas allí les han servido para alcanzar a una más amplia comunidad.

También agradecieron a la Hna. Benedictina Marilyn Mark, asociada pastoral y directora de música de la parroquia de St. Thomas Aquinas quien también supervisa el Centro Newman.

El Obispo aplaudió las actividades, diciendo que estas hacen que se establezcan lazos con la comunidad de fe, y el acompañamiento en el camino espiritual es importante; esto también lleva la identidad católica a los demás.

“Cada uno de nosotros, por la virtud del bautismo somos misioneros,” dijo el Obispo.

“Tenemos el mandato de salir y proclamar la Buena Nueva a los demás.”

El Obispo dijo que la alegría es la marca de un verdadero creyente Cristiano.